Tanto si hablas, como si no hablas, el comportamiento no verbal siempre está presente. Lo que no dices, lo siento, también se ve y se "escucha".
Coeficiente intelectual…. Inteligencia emocional….. Inteligencia no verbal…. Inteligencia vital… Inteligencias múltiples... Seguimos avanzando en el estudio de esas “inteligencias” que no acabamos de conocer y, mucho menos, de “dominar”.
Por eso quiero compartir unas ideas sacadas del libro de Teresa Baró, “Inteligencia no verbal”. Barcelona, Paidós, 2018
LO “NO VERBAL”
Lo no verbal es mucho más que el movimiento del cuerpo, los gestos o la expresión del rostro. Lo no verbal es también lo que emitimos a través del olor, de los objetos que nos adornan, el tiempo que tardamos en hacer algo, el sitio que ocupamos en un espacio o cómo saludamos a una persona conocida.
Distingamos los conceptos de “información” y “comunicación”:
- “Mensajes informativos” son los que se emiten de manera involuntaria o pasiva. Es información para quien lo ve.
- La “comunicación” es voluntaria y dirigida a otras personas con determinadas intenciones.
Por otra parte, cuando hablamos de “comportamiento” o “conducta” nos referimos a las acciones que realizamos o dejamos de realizar y que pueden ser acciones de comunicación o no.
Gran parte de nuestro comportamiento no verbal es informativo y no comunicativo. El receptor se forma una imagen del emisor a partir de la información (involuntaria) y de la comunicación (voluntaria). Desde el punto de vista del receptor, todo comunica, aunque el emisor no sea consciente de ello. Por eso, más que la expresión “lenguaje no verbal” deberíamos utilizar “comportamiento no verbal” porque alcanza cualquier tipo de expresión no verbal, voluntaria e involuntaria.
Siguiendo esta misma línea, llamamos “Inteligencia No Verbal” (INV) a la capacidad de relación entre las personas a través de lo no verbal. Aunque podemos estar callados, no podemos dejar de “comportarnos”, de “estar” o de “ser”. Tiene mucha razón Watzlawicik (psicólogo, 1921-2007) cuando afirma que “no podemos no comunicar”; es decir, podemos dejar de hablar, ero no podemos dejar de enviar información a través del comportamiento no verbal.
El comportamiento no verbal en las relaciones humanas
Para valorar la importancia de la dimensión no verbal, tengamos en cuenta lo siguiente:
- El comportamiento no verbal:
. Es omnipresente.
. Tiene una dimensión universal y una dimensión cultural.
. Se transmite de generación en generación.
. Es el reflejo de nuestra actitud y de nuestras emociones.
. Afecta a todas las facetas de nuestra comunicación.
- La comunicación no verbal:
. Tiene distintas funciones.
. Utiliza varios canales simultáneamente.
. Nos permite entendernos, pero también provoca muchas confusiones.
. Es anterior al lenguaje en la evolución de nuestra especie.
. Es la primera forma de comunicación que utilizamos cuando nacemos.
. En la mayor parte de las relaciones, precede a la palabra.
. Puede expresar lo que no sabemos formular con palabras.
. Los mensajes nos transmiten más confianza que los de la comunicación verbal, especialmente si entran en contradicción.
. Integra al individuo en una cultura, cohesiona a sus miembros y los distingue de otras.
. Puede ayudarnos a esconder quiénes somos y qué sentimos.
Los principales canales de la expresión no verbal
Cronémica (Thomas Bruneau, finales años setenta). El concepto del tiempo.
El valor que le damos a nuestro tiempo y al de los demás, marca nuestras relaciones personales. Cada cultura tiene su sistema cronémico y hay dos grandes tipos:
- La monocronía, caracterizada por el rigor en el cumplimiento de horarios, agendas y plazos, la dedicación a una sola tarea para alcanzar la máxima productividad y la importancia de los logros individuales.
- La policronía, caracterizada por una mayor flexibilidad, la simultaneidad de tareas y la importancia que se da las relaciones sociales.
El comportamiento cronémico es uno de los ingredientes de nuestra imagen y un recurso que voluntariamente podemos utilizar para marcar el tipo de relación que queremos con las demás personas.
Proxémica (Edward T. Hall). El espacio.
El espacio personal de cada persona se refleja en cómo se sitúa, qué distancias establece, cómo se acerca o se aleja de las demás personas. El espacio personal no es el que ocupamos con nuestro cuerpo, sino el espacio que lo rodea. Sus dimensiones pueden variar según la cultura, la personalidad o el contexto.
Háptica. La percepción táctil.
Cómo nos relacionamos a través del contacto físico que, voluntaria o involuntariamente, establecemos con las demás personas.
Aspecto personal y pertenencias.
El aspecto es uno de los ingredientes más importantes de nuestra imagen. Así como los demás códigos se pueden adaptar sobre la marcha a las necesidades de interacción concreta, el aspecto no se puede modificar. Podríamos adaptar nuestra posición o la intensidad de la voz durante una reunión, pero no la ropa o el peinado si nos damos cuenta de que no hemos atinado con ellos.
Kinesia. La expresión del cuerpo a partir de su postura y movimientos.
En esta comunicación intervienen todas las partes del cuerpo. Son especialmente expresivas las manos y el rostro.
Paralenguaje. Expresión vocálica.
El conjunto de aspectos vocales con los que emitimos las palabras: volumen, velocidad al hablar, silencios, ritmo, articulación, modulación…
LA INTELIGENCIA NO VERBAL
¿Qué es la inteligencia?
Inteligencia es la capacidad para elegir la mejor ocpión para enfrentarse a una situación.
Durante siglos ha estado estrechamente relacionada con el dominio de ciertas disciplinas, pero hoy, el concepto es mucho más complejo, además de haberse definido distintos tipos de inteligencia. Una de las más recientes aportaciones, de Jordi Pigem, es la de “inteligencia vital”, quien la define como “la capacidad que tiene todo viviente de entender el sentido de una situación y responder creativamente de manera apropiada a su autorrealización”. “La inteligencia – añade – es una actividad dinámica que nace de la atención al presente y se orienta a lo que resulta más adecuado en cada contexto”.
La Inteligencia No Verbal (INV)
La INV es la capacidad para percibir e interpretar el comportamiento no verbal de otras personas, y la habilidad para responder y actuar no verbalmente en cada contexto, según los objetivos que se quieran alcanzar.
Actúa siempre en dos direcciones: en la emisión y en la recepción de los mensajes.
Tiene ocho pilares básicos:
- Percepción.
- Interpretación
- Autoconciencia.
- Autorregulación.
- Adaptación.
- Proacción.
- Planificación.
- Entrenamiento.
Las Inteligencias Múltiples (Howard Gardner, años ochenta)
La inteligencia no está aislada del entorno, y no es inteligencia si no es útil para ese entorno.
Aunque la neurociencia no le otorga base científica, Gardner identificó siete tipos de inteligencia:
- Lingüístico-verbal.
- Visual-espacial.
- Musical.
- Corporal-cinestética.
- Interpersonal.
- Intrapersonal.
- Naturalista.
La teoría de Sternberg (1949)
Su teoría triárquica (1985) intentó explicar cómo se estructura la inteligencia humana. La inteligencia sería un conjunto de habilidades para triunfar en la vida sociocultural. Según él, hay tres capacidades básicas que determinan la capacidad intelectual:
1. La inteligencia analítica o componencial: capacidad de captar, almacenar, modificar y trabajar con la información. Se suele medir en los tests de inteligencia tradicionales.
2. La inteligencia creativa o experiencial: nos permite aprender a través de la experiencia y se vincula a la creatividad y a la resolución de problemas nuevos.
3. La inteligencia práctica o contextual: capacidad, no solo de adaptarse al entorno, sino también de intentar modificarlo o seleccionar otro contexto más favorable.
La Inteligencia Emocional
Goleman la define como “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de las demás personas, de motivarnos y de manejar adecuadamente las relaciones” (Daniel Goleman, “Inteligencia emocional”, Barcelona, Kairós, 1996, pág. 430).
Uno de los pilares de la inteligencia emocional es la capacidad para regular nuestros impulsos y esto significa regular nuestra comunicación. Otro de sus pilares es la capacidad de iniciar una acción, de actuar según unos objetivos. Y esta automotivación y la iniciativa comunicativa están estrechamente realacionadas.
La Neurociencia: el gran salto
Cuando alguien nos dice “es que yo soy así” o “a mi edad ya no se puede cambiar”, podemos aceptarlo como la expresión de una actitud personal, pero no como la descripción de una realidad inamovible.
Las neuronas espejo
Estas neuronas nos permiten:
- Conocer y comprender lo que la persona que tenemos enfrente siente o experimenta (componente cognitivo).
- “Sentir” lo que esa persona siente (componente emocional).
- Responder de la manera que creemos adecuada (componente social).
“Las neuronas espejo nos permiten entender la mente de las demás personas,
sintiendo, no pensando”
(Giacomo Rizzolatti)
La teoría de la mente
Esta teoría se refiere a la habilidad para comprender y predecir la conducta de otras personas, sus conocimientos, sus intenciones, sus emociones y sus creencias.
Características de una persona con Inteligencia No Verbal
Una persona con INV cuando es capaz de moverse con eficacia en un entorno determinado, no en cualquiera. Esta persona es capaz de:
a) Percibir el comportamiento de las demás personas (percepción): notar cómo se comportan, desde el más sutil movimiento hasta su conducta en general.
b) Interpretar el comportamiento de las demás personas (interpretación): preguntarse el porqué de su actuación.
c) Ser consciente del propio comportamiento (autoconciencia):a veces es más fácil conocer a las demás personas que a una misma.
d) Autorregular el comportamiento (autorregulación): controlar las reacciones y regular nuestro estilo de comunicación.
e) Adaptarse al contexto y a la persona interlocutora (adaptación): las relaciones humanas son una constante adaptación a las reacciones de las otras personas.
f) Actuar por iniciativa propia (proacción): decidir nuestras acciones y liderar la interacción.
g) Planificar acciones de comunicación (planificación): reflexionar acerca de la mejor manera de conseguir un objetivo, establecer un plan de acción, decidir el tono de comunicación que más conviene y adecuar los códigos verbales y no verbales a la consecución de unos fines.
h) Entrenarse para mejorar competencias (entrenamiento): si somos humildes, estaremos siempre pendientes de lo que podemos mejorar y buscaremos recursos para seguir desarrollando habilidades. No debemos olvidar que para que un propósito llegue a su fin, tenemos que pasar a la práctica. El entrenamiento continuo nos mantiene atentas, despiertas, receptivas, flexibles y nos vuelve cada vez más inteligentes. Aprender no es saber muchas cosas, sino saber hacerlas. Además, el entrenamiento tiene que tener un sentido: la mera repetición no nos aporta nada si no sabemos por qué lo hacemos.
Los valores
Los valores se comunican a través de tres conductas:
- Las palabras, que no son neutras: hay formas de hablar que expresan humildad, prudencia, serenidad, paz, mientras que hay otras formas de comunicar verbalmente en las que todos estos valores están ausentes.
- Los silencios: que, muestran valores, como la discreción.
- Las acciones: son el conducto más relevante. A través de la forma en que hacemos las cosas, mostramos realmente los valores que hay en nuestra mente y en nuestro corazón. La acción revela valores.
Conviene recordar que a través de nuestro comportamiento no verbal contagiamos emociones, establecemos vínculos y transmitimos una cultura y unos valores.
La educación y la Inteligencia No Verbal
Una cosa es hablar, otra cosa es escribir y otra cosa es comunicarse.
Es necesarios instruir en Inteligencia no verbal a las personas educadoras y/o formadoras para que:
- Entiendan la importancia de lo no verbal como vía permanente de la relación.
- Puedan conocer mejor su imagen y lo que transmiten.
- Lean mejor los mensajes de las demás personas y obtengan información del estado de ánimo del alumnado.
- Puedan mejorar la gestión de las propias emociones.
- Tengan capacidad crítica respecto a los comportamientos heredados y puedan revisar costumbres, hábitos y pautas para actualizarlos o sustituirlos.
- Sean más proactivas en la influencia sobre sus personas interlocutoras.
- Sepa transmitir contenidos de manera más atractiva y eficaz.
- Diseñen escenarios y planifiquen puestas en escena para conseguir determinados objetivos.
- Se conviertan en un mejor modelo de comportamientos no verbal.
La importancia de la Inteligencia No Verbal en las organizaciones
La mayoría de las organizaciones exhiben sus políticas relacionados con la responsabilidad social corporativa (RSC), pero muchas veces se contradicen con lo que pasa internamente: carencias en la comunicación, mala relación entre las personas empleadas, personas directivas poco empáticas... Esto sucede fundamentalmente por una falta de atención a la comunicación de las personas y especialmente por la mala comunicación de las personas directivas, dando de nuevo con un problema ya antiguo: la falta de habilidades en los altos niveles de las organizaciones. Y no solo de habilidades para relacionarse con todos los niveles de la organización, sino también de conocimientos para tomar decisiones, establecer políticas internas o evaluar la imagen que proyecta la organización. Hace falta relacionar la RSC con la responsabilidad comunicativa personal de las personas directivas (RCPD).
Uno de los grandes retos de la organizaciones es ser inteligentes emocionalmente y responsables socialmente.
Las organizaciones necesitan personas altamente flexibles, capaces de autoanalizarse, de adaptarse al entorno, de relacionarse con todo tipo de personas en equipos que cada vez son menos permanentes.
“Te contratan por el talento. Te despiden por el talante” (o deberían...)